Sé que jamás volveré a sentirte, que nunca más volveremos a ser tú, yo, nosotros. También sé que todo lo que vivimos, está ahí estancado en el pasado. Para ti, un simple recuerdo, pero para mi... para mi la vida.
Si dijera que no te echo de menos estaría mintiendo, porque sí, te echo de menos y no sabes cuánto.
Te necesito. Necesito esos besos inesperados, esos abrazos que me dabas como si el mundo se acabara depués, aquellos que me hacían sentirme segura. Necesito tocar tu pelo y acariciar tu cara. Necesito tus bromas y la habilidad que tenías de picarme y luego pedirme perdón. Me encantaba cuando me tenia que ir y me decías que no me fuera, que me quedara un poco más o sino me encerrarías en tu casa. Echo de menos los trozos de canciones que me dedicabas y todas aquellas conversaciones hasta que se hiciera de día. Te echo de menos a ti.
Ya no hay vuelta atrás, el mundo se me echa encima si, y muchas veces me pregunto que hubiera pasado si hubiera tomado la otra decisión, pero ¿sabes qué? es mejor haber amado y perdido que nunca haber amado. No me arrepiento de nada, me hiciste sonreir día a día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario